Era hija sólo de Zeus, no nació de una madre: ya desarrollada y con la armadura completa surgió de su cabeza. En la primera referencia que tenemos de ella, la Ilíada, se la presenta como una diosa guerrera fiera y despiadada, pero en otros lugares sólo guerrea para defender el Estado y el hogar de enemigos externos. Era la principal diosa de la ciudad, la protectora de la vida civilizada, de la artesanía y de la agricultura; la inventora de las brigas y la primera que domó caballos para que los usaran los hombres; y también la hija favorita de Zeus, que confiaba en ella para llevar la terrible égida, su rodela y arma devastadora, el rayo.
Cuando se habla de ella siempre se una la expresión "ojos garzos" o, como se traduce en ocasiones, "ojos centelleantes". De las tres diosas vírgenees ella era la principal y se la llamaba la Docella, Parthenos, y a su templo el Partenón. En la poesía posterior representa la sabiduría, la razón y la pureza.
Atenas era su ciudad destacada, el olivo creado por ella su árbol y la lechuza su pájaro.
Los dioses, Edith Hamilton.
Del contenido
Debido a la escasez de tiempo por asuntos escolares entre otros, dedicaré a proveer información de la autora Edith Hamilton de su libro Mitología una hora como mínimo todos los días. Este blog se irá construyendo poco a poco, les pido paciencia.
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viernes, 5 de abril de 2013
sábado, 30 de marzo de 2013
MARSIAS
La flata la inventó Atenea, pero la desechó porque para tocarla debía hinchar los carrillos y eso le desfiguraba el rostro. Marsias, un sátiro, la encontró y la tocó de un modo tan encantador que se atrevió a retar a Apolo a una competición. El dios ganó, por supuesto, y para castigar a Marsias por su audacia lo hizo despellejar.
Mitos breves, Edith Hamilton.
Mitos breves, Edith Hamilton.
viernes, 29 de marzo de 2013
ARACNE
Sólo el poeta latino Ovidio cuenta esta historia, de ahí que se usen los nombres latinos de los dioses.
El triste destino de una doncella fue otro ejemplo de lo peligroso que era creerse igual a los dioses en algo. Minerva era la tejedora del Olimpo igual que Vulcano era el herrero. Lógicamente, ella consideraba que sus tejidos eran inigualables en exquisitez y belleza, y se ofendió mucho cuando una simple campesina llamada Aracne afirmó que su trabajo era superior. La diosa acudió de inmediato a la cabaña donde vivía la campesina y la retó a una competición. Aracne aceptó. Ambas colocaron sus telares y extendieron la urdimbre sobre ellos. Luego empezaron a trabajar, con grandes montones de bellos hilos coloreados como el arcoiris, y hebras de oro y plata a su lado. Minerva hizo su mejor trabajo y el resultado fue una maravilla, pero el de Aracmme que terminó a la vez que la diosa, no era en un modo inferior. Así que Minerva, en un ataque de furia, rasgó la tela de arriba a abajo y golpeó a la muchacha en la cabeza con la lanzadera. Aracne humillada, mortificada y terriblemente furiosa se ahorcó. Entonces Minerva se arrepintió un poquito, descolgó el cuerpo y lo roció con un líquido mágico. Aracne se transformó en una araña, y desde entonces conservó su destreza como tejedora.
Mitos breves, Edith Hamilton.
El triste destino de una doncella fue otro ejemplo de lo peligroso que era creerse igual a los dioses en algo. Minerva era la tejedora del Olimpo igual que Vulcano era el herrero. Lógicamente, ella consideraba que sus tejidos eran inigualables en exquisitez y belleza, y se ofendió mucho cuando una simple campesina llamada Aracne afirmó que su trabajo era superior. La diosa acudió de inmediato a la cabaña donde vivía la campesina y la retó a una competición. Aracne aceptó. Ambas colocaron sus telares y extendieron la urdimbre sobre ellos. Luego empezaron a trabajar, con grandes montones de bellos hilos coloreados como el arcoiris, y hebras de oro y plata a su lado. Minerva hizo su mejor trabajo y el resultado fue una maravilla, pero el de Aracmme que terminó a la vez que la diosa, no era en un modo inferior. Así que Minerva, en un ataque de furia, rasgó la tela de arriba a abajo y golpeó a la muchacha en la cabeza con la lanzadera. Aracne humillada, mortificada y terriblemente furiosa se ahorcó. Entonces Minerva se arrepintió un poquito, descolgó el cuerpo y lo roció con un líquido mágico. Aracne se transformó en una araña, y desde entonces conservó su destreza como tejedora.
Mitos breves, Edith Hamilton.
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